San Cristóbal, amaneció tomada por una gran romería y peregrinación como demostración de fé, fervor y alegría tachirense con devoción mariana, al peregrinar un recorrido de siete kilómetros, encabezado por el Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, Monseñor Mario del Valle Moronta., para venerar a la Patrona de los tachirense "La Virgen de la Consolación"
La peregrinación duró 150 minutos en su recorrido, arrancó a las 6 de la mañana desde la Catedral de San Cristóbal, ubicada frente a la Plaza Juan Maldonado, en pleno centro de la ciudad, hasta la Basílica Nuestra Señora de la Consolación en Táriba, para honrar la promesa hecha a la virgen en agradecimiento por los favores concedidos y como penitencia para recibir las gracias solicitadas.
Algunos hicieron el recorrido con los pies descalzos y al llegar a la Basílica realizaron el último trayecto de rodillas hasta el altar. A media mañana, cuando se concentró la mayoría de devotos, la virgen de la tablita fue sacada en un nicho al atrio de la Basílica.
Las personas ofrecieron a la virgen sirios, flores de todos colores e incluso objetos personales como diplomas de grado, rosarios y miles de oraciones.
"La gente viene porque tiene un gran amor a la virgen. Muchos me han comentado que quieren pedirle por toda la situación que vivimos en Venezuela para que cambie.
La Virgen de la Consolación, fue llevada a Táriba, por los padres Agustinos, en el año de 1.560, quienes provenían del Reino de Granada.
"Son muchos los Milagros o Favores Recibidos que los devotos de la Virgen de Consolación le atribuyen. Es por esto que deseamos que Ud. comparta su experiencia y así proyectarla aún más a todos los rincones "
